El Argentino II parte de Ushuaia, buscando el Atlántico a través del Canal Beagle.
Desde siempre, ver un barco en el horizonte con las últimas luces del día, me produce una sensación de melancolía. ¿Hacia donde se dirije?. ¿Quienes van en él?. ¿Qué preocupaciones dejan atrás?.¿Será un buen barco o un candray matahombres?. Para alguién que esté mirando desde su popa, el Sarmiento es el barco del horizonte; no sabe a donde vamos, ni quienes somos, ni que preocupaciones tenemos. Es como mirarse en el espejo. Las respuestas están aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario